Las hierbas ibicencas se elaboran siguiendo las recetas manuscritas de Juan Mari Mayans, creador del licor y fundador de la primera destilería. Se siguen obteniendo mediante métodos totalmente artesanales, aprovechando avances tecnológicos de controles de calidad y estándares de producción. La única diferencia destacable desde el primer licor obtenido en el siglo XIX al obtenido en los tiempos actuales es que el fuego que nutre el alambique de cobre es mediante quemadores de gas en lugar de utilizar leña y carbón.